Por: Fabian Gutiérrez Araujo
México es el país número uno en el mundo en bullying y ciber bullying con 180 mil casos, por lo que siete de cada diez alumnos sufren acoso escolar, seguido de Estados Unidos con el segundo lugar, así lo dio a conocer la investigadora y doctora en educación Alma Salazar Quijada para la Revista Potosina de Educación.
Dijo que desafortunadamente en México no se generan estadísticas más profundas, así como esfuerzos importantes para atender el problema y no se evalúa si las intervenciones son efectivas donde cada vez más niños son víctimas de acoso, o acoso cibernético.
Señaló que las balaceras y masacres en escuelas se dan principalmente porque no hay una supervisión correcta y un encausamiento del alumno de que hacer y que no, así como la forma en cómo se utiliza el celular y el internet en las aulas.
Dijo que hay una responsabilidad compartida de padres de familia, docentes y directivos que no están inmiscuidos en lo que viven los niños y jóvenes.
“La violencia excesiva que hay en las escuelas de México y en SLP se debe a la falta de valores y a la supervisión que hemos dejado los padres de familia en lo que hacen los hijos”.
“Es más fácil regalar una tableta o celular para que los niños se entretengan en lugar de como padres de familia darles herramientas con actividades educativas o superación personal o emocional”, advirtió.

La investigadora manifestó que el celular en el aula es una herramienta que debería de usarse en beneficio de la educación, por lo que los docentes deben prepararse para desarrollar una competencia digital de profesorado para que el celular en las aulas se utilice responsablemente.
Dijo que cuando no se encausa como padre de familia o docente, tampoco podemos alejarlos de la tecnología, y así quedó demostrado con la pandemia donde la educación se adelantó diez años y demostró que no estábamos preparados para encausar la tecnología.
La especialista en educación enfatizó que los padres de familia deben trabajar en el control de las emociones en los hijos, y brindarles atención, porque es precisamente ahí donde los necesitan atención y se puede generar un punto débil para el acoso escolar.
Señaló que entre los casos más sonados en los estudiantes mexicanos hay desde suicidios hasta intoxicación por pastillas a causa del acoso escolar, lo que es lamentable porque no se le ha dado la atención necesaria como padres de familia docentes y sociedad en general.
COMO DETECTAR EL ACOSO ESCOLAR
Entre los síntomas para detectar acoso escolar es principalmente cambios en la conducta, la negativa de asistir a clases o a la escuela, así como realizar ciertas actividades, moretones en el cuerpo sin justificación, enojo, nerviosismo en los alumnos, aislamiento, trastornos alimenticios y dolor de cabeza.
Aseguró que no todas las instituciones educativas están capacitadas para atender o detectar el bullying, por lo que el 90 por ciento de los docentes no están preparados para estos casos, y los directivos en lugar de ayudar perjudican a los maestros con la carga administrativa en las aulas.
“También hay docentes que si hacen su trabajo, generan confianza con el alumnado, están atentos en las mínimas acciones de los estudiantes y sobre todo saben escuchar.”.
La doctora Salazar Quijada dijo que el acoso escolar se previene fomentando valores en casa y en la escuela, promoviendo la comunicación entre compañeros, generando empatía, y que los niños aprendan a detectar el bullying para denunciarlo inmediatamente con maestros y padres de familia.
Enfatizó que, en los programas para combatir y denunciar el acoso escolar en San Luis Potosí, las autoridades no han sido capaces de resolver el problema porque no se involucran en el aprendizaje, y no han vivido lo que vive un docente, es fácil plantear leyes, programas, etc. Pero jamás se ha hecho una evaluación si realmente funcionan en los contextos que vive cada centro escolar. Explicó