El estancamiento laboral es una de las situaciones más frustrantes para cualquier profesional, sobre todo, cuando este ha demostrado que se toma su tarea con seriedad, busca soluciones constantemente y quiere crecer en la empresa.
Sin importar lo bien que hagas el trabajo, hay algunas actitudes y situaciones que pueden estar boicoteando tu ascenso. Si eres parte de ese grupo de personas a los que jamás se toma en cuenta, conoce los motivos más comunes que frenan cualquier promoción para revertirlos y alcanzar aquello que tanto deseas.
6 motivos que pueden estar frenando tu desarrollo profesional
1 – No te estás esforzando lo suficiente
Ser parte de una plantilla fija de trabajo y hacer tu tarea no es tan meritorio; ya que en fin, te pagan para que lo hagas.
Muchos colaboradores creen que por estar durante un buen tiempo en un mismo empleo deben ser ascendidos; pero a la hora de evaluar su trabajo, si no ha aportado cosas nuevas o si se ha limitado a hacer su tarea y ya, probablemente la empresa busque para un rol más desafiante a alguien que ha demostrado sus ganas de progresar día a día.
2 – No sabes pedir lo que quieres
Si, a todos nos gustaría que nuestros jefes vinieran y nos dijeran “hemos notado que trabajas muy duro, por lo que te vamos a recompensar”. Ciertamente esto sería no solo ideal sino justo, pero tal como la vida, las relaciones laborales suelen no ser tan justas.
Así es que si piensas que mereces un ascenso pero no lo comunicas, es probable que sea difícil que lo obtengas. Exprésate (siempre de manera positiva, claro). Estás en todo tu derecho como trabajador a reclamar lo que crees justo.
3 – Siempre te quedas más horas que las que te corresponden
Si bien la mayoría de los trabajadores tiende a pensar que quedarse tiempo extra en el trabajo es una señal de compromiso, esto puede ser interpretado en sentido contrario.
Es decir, tus jefes o superiores podrían entender que el tiempo estipulado para cumplir con tu trabajo no te es suficiente y esto podrían tomarlo como un índice de cierta incompatibilidad, cuando en realidad tal vez solo estés muy comprometido y por eso te esfuerzas más de lo que se exige.
4 – ¿Trabajas en equipo? Ten cuidado, alguien podría estar estropeando tu tarea
En todos los equipos de trabajo hay varios perfiles: el que se esfuerza más, el que solo “tapa el ojo” pero en realidad poco hace, el que boicotea el trabajo del resto y el que asume los méritos ajenos, entre otros.
Tal vez no te has dado cuenta (o si) y alguno de tus compañeros está siendo poco leal con tu trabajo. Síguelo más de cerca para que advierta que estás atento y en caso de que compruebes que alguien toma méritos por ti o estropea tu trabajo, encáralo.
5 – Tu jefe no tiene idea de tu trabajo
Otro punto que podría estar jugándote en contra a la hora de obtener un ascenso es la situación de que tu jefe no tenga idea que haces y como lo haces.
Tal vez solo vea los números al final, pero nunca se paró a analizar cómo llegan los buenos resultados. Si eres de los trabajadores que jamás recibe feedback por su tarea, probablemente seas del grupo de los que tienes un jefe al que no le importas; o tal vez, no tiene buena afinidad contigo y por eso frena tu desarrollo profesional.
6 – Nunca aceptas otro punto de vista
Sabes qué hacer y cómo hacerlo, lo que te lleva a no poder jamás escuchar otro punto de vista o te hierve la sangre cuando alguien te realiza una crítica. Es decir, crees que eres autosuficiente: nadie podría enseñarte nada ni hacer algo mejor de lo que lo haces tú.
Si tienes esa actitud, nadie querría ponerte en frente de un desafío mayor, ya que el trabajo en equipo, donde se escuchan y respetan las opiniones de todos, es clave para no solo cumplir sino sobrepasar las expectativas de una empresa, así como también es fundamental para crear un buen ambiente laboral.