– Catedrática de la EBC aseveró que los daños por lluvias detonaron un fenómeno migratorio
Los huracanes Emanuel e Ingrid, que trajeron fuertes precipitaciones pluviales en San Luis Potosí, trajeron afectaciones económicas para la entidad, principalmente en lo que respecta a actividades agrícolas en 20 municipios de la Zona Huasteca, lo que también generó un fenómeno migratoria en los municipios que se vieron más afectados, aseveró la catedrática de la Escuela Bancaria y Comercial (EBC), Mtra. Susan Corina Eslava Juárez, durante conferencia de prensa desarrollada en el campus San Luis Potosí de esta institución.
Explicó que el 33% de la economía en la Zona Huasteca depende de la actividad agrícola, por lo que las lluvias habrían no solo afectado en que muchas familias se quedaran sin un techo donde habitar, sino también en que perdieran su fuente de ingreso económico, toda vez que en San Luis Potosí se calculan más de 13 mil hectáreas de cultivo devastadas por las lluvias.
Mencionó que un fenómeno que ocurre recurrentemente, tras los desastres naturales, es una caída en picada de la ocupación de la población afectada, por lo que podría esperarse a un mediano plazo un incremento en los niveles de desocupación, en los municipios que se vieron más afectados por las lluvias, si se toma en cuenta que muchas empresas resultaron afectadas en sus finanzas.
Uno de los efectos económicos que tienen este tipo de desastres naturales, explicó la experta, está en que deja de circular el dinero, dado que la población no tiene acceso a instituciones bancarias o centros comerciales, aunado a que muchas vías carreteras cierran su circulación, lo que genera grandes costos para las empresas que se ven impedidas en el traslado de insumos y productos.
La catedrática de la EBC consideró que las afectaciones de San Luis Potosí no fueron tan grandes si se comparan con otros estados del país, ya que únicamente se destinaron 350 millones de pesos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) para reactivar la economía en 22 municipios potosinos, lo que representa un 17.5% del recurso total de este fondo, mientras que entidades como Guerrero recibieron hasta el 40% del total del recurso que se destinó a esta contingencia climatológica.
Señaló que las medidas que deben tomarse, principalmente en la Zona Huasteca, para abatir las afectaciones económicas que trajeron las lluvias, deben ser impulsar actividades productivas, que no se vieron tan afectadas como la agricultura, como podría ser el turismo y con ello fomentar un mayor consumo en determinadas partes del estado, en beneficio de los sectores más afectados de la población.