Identifica si tus compañeros de trabajo se dejan llevar por la inseguridad y perciben tu trabajo como una amenaza
- El miedo y la inseguridad son los motivos por los que algunas personas boicotean el trabajo o los logros de sus compañeros de trabajo.
- Aprende a detectar las conductas de las personas tóxicas y cómo enfrentarte a ellas.
- El síndrome de Proscuto hace referencia al tipo de personas que menosprecian el talento ajeno e intentan deshacerse de las personas que destacan o son vistas como una amenaza a su liderazgo.
En cualquier ámbito, tanto en el privado como en el público, abunda un tipo de persona que suele ser cruel y muy crítica ante el éxito de los demás. Suelen parecer mezquinos y trepas, pero realmente es su manera de ocultar la inseguridad que les produce el éxito o la felicidad ajena.
En el ámbito profesional, puede ser complicado lidiar con este tipo de personas, sobre todo si acaban afectando a nuestro comportamiento, a nuestro trabajo y pueden poner en riesgo nuestro empleo.
Estas son algunas características que pueden ayudarte a detectar comportamientos tóxicos en tus compañeros de trabajo:
Se sienten inseguros o con complejo de inferioridad
Ante ideas innovadoras o mejores que las suyas, reaccionan de forma inquieta y temerosa.
Suelen ser personas poco asertivas y desconfiadas, por lo que ante una propuesta o buena idea ajena, reaccionarán de forma negativa o intentarán descartarla sin escucharla.
Están a la defensiva
Suelen usar sus esfuerzos en limitar el talento de los demás, en lugar de trabajar en el suyo propio.
Tienden a estar más atentos de las acciones ajenas, solo con la finalidad de criticarlas, manipularlas o usarlas en su beneficio propio.
Quieren ganar a toda costa
Es del tipo de gente que más le cuesta trabajar en equipo y coordinarse en el reparto de tareas.
Prefieren trabajar solos y cargar con más responsabilidad, solo como manera de evitar que el resto puedan presentar ideas o resultados mejores.
No saben reaccionar ante los cambios
Suelen tender a acomodarse y a tenerlo todo bajo control, por lo que cualquier persona que haga algo diferente o innovador, suele ser visto como una amenaza.
Las personas tóxicas son muy rígidas con su zona de confort y les perturban los cambios e imprevistos que no pueden manejar a su antojo.
Se justifican con afirmaciones irracionales
No todos ellos son personas menos capaces que el resto, pero sí que gastan más tiempo en desacreditar el trabajo ajeno, que en trabajar en mejorar sus habilidades.
Preferirán poner excusas o usar argumentos poco sólidos, para buscar inconvenientes en el trabajo del resto y nunca admitirán un error o fracaso.
Juzgan todo desde su punto de vista
No suelen poner en práctica la empatía o el ver las cosas desde otros puntos de vista.
Por tanto, prefieren boicotear la innovación y la creatividad, sobre todo si no son capaces de comprenderla o de alcanzarla.
Debes de saber identificar estas conductas, sobre todo para evitar pensar que estás haciendo algo mal y comenzar a sentir que eres malo en tu trabajo.
Los compañeros, y especialmente los jefes tóxicos, pueden ser un obstáculo que no permita tu desarrollo profesional o que limite tu creatividad. Detectarlos es importante para poder buscar soluciones, o incluso, un nuevo empleo.