Según los últimos datos habrá 400.000 víctimas de Bullying para el 2020.
A principios de este año, Save The Children también lanzó un informe, llamado «Yo a eso no juego«, con perturbadores resultados. Uno de cada diez alumnos reconoce haber sentido algún tipo de acoso por parte de sus compañeros.
Sin embargo, debemos aceptar que el acoso ha existido, existe y existirá en todas las sociedades del mundo. Lo que tenemos que hacer es aceptar el problema, intentar prevenirlo, implementar medidas y acabar con él.
Finlandia es el segundo país con un mejor sistema educativo del mundo, después de Suiza. Sin embargo, en sus aulas también hay acoso (o había). Por ello, se propusieron acabar con el bullying mediante un método que ellos mismos inventaron, probaron y avalaron, el método KiVa.
¿Qué es el método KiVa?
“Kiusaamista Vastaan” significa en finés «contra el acoso escolar». Esta propuesta, que comenzó a utilizarse en 2009, es, a día de hoy, utilizada en el 90% de los colegios del país. Su éxito está asegurado, ya que se ha demostrado que la fórmula KiVa reduce todos los tipos de acoso. Tanto es así que, este método ya se está implantando en los Países Bajos, Estonia, Italia y Gales.
Este sistema no se centra en el acosado ni el acosador, si no que intenta hacer partícipes y testigos activos al resto de compañeros. Los acosadores suelen actuar para hacerse notar, ganar audiencia, popularidad y fuerza. Sin embargo, cuando el resto de alumnos no participa con sus risas o sus comentarios, logran que el niño que hace bullying intente buscar el reconocimiento por otros medios no agresivos.
Para entender el problema, los niños deben asistir a una serie de clases que tendrán lugar a los 7, los 10 y los 13 años. Aquí lograrán concienciarse y aprender a distinguir un simple juego del acoso.
Además, un equipo de adultos especializado en Bullying estudiará y trabajará en los casos particulares que detecte en cada escuela. Logrando acabar, de forma definitiva, con este gran lastre.