El gobierno de San Luis Potosí ya debe estar considerando las consecuencias económicas una vez que Donald Trump arribe a la presidencia de Estados Unidos, porque el estado potosino es expulsor de mano de obra hacia ese país y se habrá de endurecer las políticas migratorias.
Así lo consideró la investigadora Cecilia Costero, académica del programa de Estudios Políticos e Internacionales de El Colegio de San Luis.
En la elección presidencial de Estados Unidos ganó el voto blanco conservador y quienes peores momentos tendrán en el futuro bajo la esa presidencia, serán los migrantes latinos y añadió que en lo inmediato no podrá obstaculizar el envío de remesas aunque deben irse tomando ciertas medidas para mitigar los efectos de sus nuevas políticas contra los migrantes latinos que junto con las minorías islámicas serán de los grupos más vulnerables.
Sin embargo, consideró que 193 años de relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y México no pueden depender de quien ocupe la silla presidencial en La Casa Blanca y agregó que a pesar de los grandes retos del país como violencia, inseguridad y otros indicadores preocupantes “no todo depende de Estados Unidos”.
Confió en que habrá sectores en Estados Unidos que terminen por moderar las promesas de campaña de un candidato que se mostró xenófobo, misógino y racista, aunque reconoció que a los analistas internacionales preocupa el discurso incendiario que terminó por convencer a miles de votantes y apuntó que los muros no resuelven nada.
Destacó además que el voto popular si favoreció a Hilary Clinton, sin embargo, el mecanismo que se utiliza en ese país para conteo de votos proporcional por estado, terminó por definir la elección a favor del empresario, lo que además refleja el hartazgo de un sector de la población contra candidatos tradicionales y partidos políticos.