En México la clase política esta desgastada y sin propuesta, además el crimen organizado ha penetrado las instituciones ante la incapacidad del estado para gobernar en algunas zonas y dejar espacios de poder que ocupan otros actores, así lo señaló el investigador Sergio Aguayo quien impartió la conferencia “El estado de la democracia en México”
en el Colegio de San Luis.
El Programa de Estudios Políticos e Internacionales del COLSAN coordinó la visita del politólogo de El Colegio de México, quien dijo que el caso Ayotzinapa evidenció hasta donde el poder del mal ha penetrado a las instituciones.
“La incapacidad del estado en algunas regiones para gobernar, creo vacíos de poder que han sido llenados por otros actores y uno de ellos ha sido el crimen organizado, por ello en algunas zonas, hablar de autoridades estatales y municipales es hablar de esos grupos delictivos”.
El estado perdió el control de la violencia ante la indiferencia de los partidos políticos y las instituciones de derechos humanos, de quienes ya no son factor de cambio, son instituciones agotadas que sólo defienden sus pequeños privilegios como parte de un aparto burocrático al que sólo le conviene conservar un empleo.
“Hemos sido testigos de cómo los cuadros represivos de los aparatos de seguridad que tenía el estado se han incorporado a estas organizaciones delictivas y sus métodos de desaparición de opositores que hoy son utilizados en contra de la sociedad civil”.
El investigador Sergio Aguayo aseguró que la democracia esta carcomida porque ni autoridades ni actores políticos tiene propuestas serias y viables ante una crisis profunda.
Las universidades y centros de investigación, sociedad civil organizada, iglesia católica y el sector empresarial son cuatro actores básicos que tienen el compromiso de generar un cambio ante un panorama en donde los partidos políticos están colapsados y a nivel mundial hay una crisis de los modelos históricos.
Sobre las candidaturas independientes, apuntó que no confía en ese modelo para elecciones federales, locales y presidentes municipales porque hay un nexo más cercano con la sociedad y hay más capacidad de controlas los excesos una vez que asumen el poder.