Las narco series y narco corridos tienen un efecto residual propagandístico y de apología del delito, por lo que sería una buena medida discutir su horario de transmisión en la barra programática o su salida del aire, opinó el doctor Miguel Aguilar Robledo, director de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanidades.
El académico mencionó que este tipo de programas tienen un gran atractivo, por representar una realidad que se vive en el país de forma dramatizada, y a la vez reflejar un problema nacional en el que un gran segmento de la sociedad tiene interés; seguido del sentimiento de curiosidad y morbo por conocer detalles de la realidad que desconoce el ciudadano común sobre cómo actúan los narcos, sus nexos con las autoridades, su dominio territorial, entre otros misterios.
Señaló que este tipo de programación podría ser un factor que influye en que los jóvenes dejen sus estudios, pero destacó que es un efecto residual, ya que se hace atractivo para el joven cómo los narcos viven vidas de ostentación y riesgo. En particular para una sociedad vulnerable, donde los jóvenes no ocupan el lugar que deberían, ya que el número de jóvenes que no estudian ni trabajan se estiman en más 7 millones en todo México.
El doctor Aguilar Robledo mencionó que es difícil medir el impacto de las narco series, en el ámbito de reclutamiento de jóvenes por el crimen; “deberían ofrecerse en horarios exclusivos para una audiencia adulta y en la medida de lo posible mantener a los niños y adolescentes fuera de esa programación”, dijo.
Opinó que sería buena idea que las autoridades se encargarán de sacar del aire las narco series o programas que hagan apología del delito, por un principio precautorio, pero con las reservas de no violar la libertad de expresión de los productores, ya que influyen a una sociedad que esta sobre expuesta en temas de violencia desde la última década.