“Los niños tienen altas expectativas de salir adelante, ellos ven el mundo desde otra perspectiva a su corta edad, eso me sorprende, porque a pesar de que carecen de recursos económicos, y que el 90 por ciento de los padres de familia se dedican a la actividad agrícola como jornaleros, los niños dicen que quieren seguir estudiando, sueñan con ser doctores, ingenieros o mecánicos”.
El maestro José David Vázquez López, docente desde hace 15 años de la primaria Josefa Ortis de Dominguez, de la comunidad de Terrones de Sangre de Cristo en la delegación de Bocas, asegura que la mayoría de los niños a los que les da clase, no quieren seguir los mismos pasos que sus padres como trabajadores agrícolas, ellos quieren aprender oficios, o tener una profesión.
“Los niños quieren romper esquemas, tienen deseos de salir adelante, a mí me dicen que quieren ayudar a sus papas, y esa es una gran oportunidad que te la docencia, motivar a los alumnos para que hagan realidad sus sueños, que traspasen barreras y sean felices”.
Explica que ser maestro le ha dado grandes satisfacciones, como ver a algunos de sus exalumnos regresar a la comunidad y saber que terminaron una carrera técnica o profesional, por lo que asegura que cuando un niño expresa algo, hay que escucharlo con atención, porque está diciendo la verdad.
Una de mis exalumnas ya termino una carrera universitaria, y conozco otros que ya están a punto de terminar la universidad, por lo que creo que es importante destacar que aquí en Terrones, hay un buen porcentaje de jóvenes que continúan sus estudios.
“Al terminar la primaria los alumnos se van a estudiar la secundaria a una localidad que se llama La Manta, ubicada a dos kilómetros de Terrones, se van caminando o en bicicleta, y de ahí terminando la secundaria se van a estudiar la preparatoria a la comunidad de Bocas, o al CECYTE, y de ahí los jóvenes deciden si irse a la UTEC o la Universidad Autónoma.
Tengo la fortuna de ver a los jóvenes cuando visitan a sus papas, uno estudio administración de empresas en la UASLP, otro estudio mecatrónica en Nuevo Laredo, y otros están cursando la preparatoria.
El maestro Vázquez López, señala que ya no es como antes cuando los padres de familia obligaban a sus hijos a que se dedicaran a lo mismo que ellos, ahora los papas los impulsan a estudiar, se comprometen en las juntas escolares, cooperan y tienen altas expectativas de sus hijos, para que terminen la primaria y que salgan con buenas bases para enfrentar la secundaria.
“Creo que es un gran logro el que se ha hecho en la comunidad, porque desafortunadamente los padres de familia no tienen en muchas ocasiones ni para cubrir sus necesidades más básicas, como alimento y vestido”.
Aquí se respira un ambiente de esperanza y valor por el estudio, para que los alumnos tengan herramientas académicas y de valores para salir adelante y ayudar a sus familias.